Sobran ganas

Sobran ganas de romper
las reglas de etiqueta,
                 -y de entrada
desnudarte en una mesa.

Sobran ganas de beber vino
en medio de tus piernas, 

lamerlas apasionadamente
dejando pequeños espasmos
capaces de revelar 

tu erotismo y tus ideas.

Sobran ganas de romper tus bragas,
con el sol de medio día 

tomar un tour por las calles y avenidas,

de existir dentro de los cuerpos,
de revolcarnos sobre la arena. 

Sobras deseos

por desnudarte y dejar tu ropa
en algún kiosco por si nos piensan, 

oír murmurar el pecado

de una mujer prohibida 
percibir el aroma del tu sexo 

sobre mi sombra
en mi devenir, eyaculando 

tan dentro de ti 

que sientes el poder 

de un volcán 

como un gemido fuerte 

que proviene 

del fondo del planeta. 

Para la cena sobran ganas:
en un principio de un cóctel
y en tu boca entre abierta,
hielo en el calor del placer,
ropa, humedad y sed,
por describirnos una y otra vez, 

por sentir tu piel sobre mi piel.